¿TE IMAGINAS LO QUE SERIA VIVIR PERMANENTEMENTE ASUSTADO?
Que sintieras tanto y tanto miedo que no quisieras relacionarte con nadie, que no quisieras salir de “tu” lugar seguro e incluso pensaras en arrojar la toalla? Mi gato tiene miedo. ¿Cómo puedo ayudarle?
El miedo y sus consecuencias en los felinos
El hecho de ver que un gato se esconde y que muestra agresividad por miedo, es, en muchas ocasiones, lo que provoca rechazo:
- A las amantes de los gatos (porque les cuesta entender que le pasa a su gato),
- A las que no lo son tanto (porque ven en ciertos comportamientos y actitudes una agresividad que les da miedo y afianza su idea de que el gato es poco cariñoso y nada amigable).
Lo primero que tenemos que diferenciar son los diferentes tipos de miedo:
Miedos puntuales: Son aquellos que los provoca una situación concreta: ir al veterinario, un viaje, un compañero nuevo en casa (ya sea humano o animal), pirotécnica, tormentas, ruidos ensordecedores…
Miedos más profundos: Provocados por causas que han podido llevar al animal a estados críticos, tanto física como mentalmente. Por ejemplo un abandono, malos tratos, no estar sociabilizados…
Miedos “genéticos”: Se trataría de aquellos animales que durante generaciones no han tenido contacto directo “sociable” con el ser humano: .
- Podemos hablar de generaciones de gatos silvestres. Aquellos que viven el absoluta libertad sin contacto con el ser humano (en el caso de colonias urbanas, aunque sean alimentados por nosotros, no tiene contacto directo) .
O Los que durante muchos años han sido maltratados:
- Citaríamos, por ejemplo, a los gatos negros. Fueron maltratados y quemados vivos durante la Edad Media y que actualmente aún se usan, desgraciadamente, para ritos Satánicos. En estos casos, el miedo, la tensión y el estar siempre alerta, parece permanecer en ellos. Son muchos los casos que nos llegan de gatos negros con “miedo al mundo”, aunque fueran criados en casa, con protección y cariño.
Llegados a este punto...CÓMO PODEMOS AYUDAR A NUESTRO GATO?
Ante todo la PACIENCIA y el CARIÑO son las bases de cualquier relación que deseemos tener con nuestro felino.
No pretendas solucionar en dos días un problema que tu gato lleva acarreando durante meses o años. Emplees el método de sanación que emplees, necesitará su tiempo e ir a su ritmo para poder gestionar sus traumas y sus miedos.
El gato es un ser hipersensible al que cualquier cambio, por tonto que nos pueda parecer a nosotros le puede afectar y provocar miedo y angustia.
Es importante a la hora de tratar el miedo, hacer memoria y saber en qué momento concreto comenzó todo :
- Tal vez fue desde que tu hijo se independizó,
- O desde que trajeron aquellos muebles a casa,
- Cuando ha nacido el bebé,
- Desde que está malito y tiene que visitar más a menudo al veterinario,
- Porque es un animal rescatado y ha sufrido malos tratos y mucho miedo en la calle…
Una vez averiguada, si es posible, la causa de miedo, podemos iniciar un PROTOCOLO FLORAL. Este ayudará a nuestro compañero de cuatro patas a gestionar todos esos sentimientos.
Flores como Rock Rose, Mímulus, Star, y todas aquellas que sean necesarias según su situación y su carácter le acompañarán en el camino de la recuperación.
Pero supongo que preferís conocer un caso práctico, así que, aquí os dejo el caso de BORN
Si tenéis algún compañero felino en estas circunstancias y lo creéis necesario, no dejéis de consultarnos a través de nuestro cuestionario.
Le ha pasado algo así a tu gato? Quieres compartir tu experiencia con nosotros? Haz tus comentarios, estaremos encantados de leerte!!!
Si te ha gustado este post, no dudes en compartirlo para que todo el mundo conozca un poco más a los gatos y los beneficios de la Terapia Floral en ellos. Muchas gracias!!!! Ronroneos
Deja una respuesta